Ser influencer es un chollo y si no que se lo pregunten a Aida Domenech que ni siquiera durante sus vacaciones de verano pudo dejar de ser Dulceida, por un momento. La última polémica que se ha generado en torno a si ser influencer es un trabajo o un chollo la protagoniza Elle Darby, una youtuber británica que ha sido humillada públicamente por un hotel de Dublín.
Quién se pica ajos come
Tal y como reconoce Elle Darby en un vídeo, fue ella misma quien propuso al hotel, The White Moose Café, una colaboración donde promocionaría el alojamiento a cambio de hospedarse en las instalaciones. Ante semejante propuesta, desde la dirección del hotel se mostraron muy ofendidos. Tan ofendidos que decidieron compartir en Facebook la deshonrosa propuesta de la youtuber y responderle de la forma más profesional: por Facebook y públicamente.
"Querida influencer. Gracias por tu correo electrónico en busca de alojamiento gratuito a cambio de publicidad. Se necesitan pelotas para enviar un correo electrónico como ese. Si te dejo dormir aquí a cambio de salir en un vídeo, ¿quién va a pagarle al personal que cuida de ti? ¿Quién va a pagar a las camareras que limpian tu habitación? ¿A los que te sirven el desayuno? ¿La recepcionista que te registra? ¿Quién va a pagar por la luz y el calor que usas durante tu estancia? ¿Tal vez debería decirle a mi personal que aparecerá en tu vídeo en vez de pagarles por el trabajo que hacen mientras estás en la residencia? Mis mejores deseos. P. D. La respuesta es no"
Y yo me pregunto. ¿Qué necesidad hay de montar semejante numerito en Facebook, señor dueño del hotel? ¿Acaso usted y la dirección de su hotel son afiliados al sindicato abajo los influencers y no nos hemos enterado? ¿Por qué la forma de resolver una propuesta comercial con una mujer de 22 años que se gana la vida en internet es diferente a la que utiliza en otras ocasiones? ¿Tan difícil es decirle "Gracias. No me interesa"?
MUCHÍSIMAS instagramers/youtubers escribían constantemente pidiendo ropa gratis a cambio de post e incluso DINERO + ropa. Lo de esto último ya no eran influencers, sino actrices. OK. Dicho esto:
— Laura (@lptrevijano) 20 de enero de 2018
¿Es de tener morro? Si. Yo personalmente creo que lo hice 1 vez en la vida por el
Quizás esté equivocada, pero no he visto más pataletas en su Facebook de este tipo. Probablemente cuando no le gusta una propuesta comercial se guarda sus impresiones para la sobremesa de la cena, en lugar de someterlas a escrutinio popular en Facebook.
morbo de saber si recibiría respuesta (no la recibí) y nunca más. Eso como youtuber. Como parte de la empresa que recibe estas peticiones, JAMÁS, y repito JAMÁS habría hecho lo que hizo el hotel este. Es que canta tanto la rabia que les escuece en el culo... es de tener
— Laura (@lptrevijano) 20 de enero de 2018
"No queremos influencers en este hotel"
A raíz de la polémica, la propia Elle Darby quiso grabar un vídeo contando cómo se sentía al respecto. A lo largo de los 17 minutos de duración, Darby se desahoga y muestra su decepción acerca del comportamiento que muestra una parte de la sociedad a trabajos como el suyo:
Me pone muy triste ver que la mayor parte de los comentarios que desacreditan lo que hago provienen de la gente mayor. ¿Cómo demonios van a valorar los niños a una persona decente que les alienta a seguir sus sueños si son criados por personas amargadas que se dedican a escribir comentarios degradando la figura de una mujer de 22 años que no ha hecho nada malo?
Y razón no le falta. ¿Por qué se señala de forma tan cruel y con el dedo bien estirado este tipo de colaboraciones y no se hace lo mismo cuando a una agencia de comunicación invita a una celebrity a un viaje financiado por una marca comercial?
En este particular mundo al revés donde los juegos de poder se rigen bajo unas reglas concretas, estaba claro quién iba a tener la última palabra. De nuevo, el dueño del hotel dio un golpe sobre la mesa y respondió a la réplica de la youtuber de la forma más madura posible: "ni youtubers ni youtubars".
The White Moose Café ha dejado claro a través de Facebook que se reserva el derecho de admisión. No quiere influencers en sus instalaciones:
He tomado la decisión de prohibir a todos los bloggers entrar en nuestro hotel y cafetería. Si alguno de ustedes intenta ingresar a nuestras instalaciones a partir de ahora, será expulsado.
Aunque todavía no sabemos muy bien cuál va a ser la política de detección de influencers en este hotel de Irlanda, aconsejamos a todo ser humano con una cuenta de Instagram abierta al público que la cierre si quiere alojarse en tan prestigioso hotel.