Del fan art no sólo hay que coger su traducción literal. Sí, por norma general suele estar hecho por seguidores de una obra ya existente, pero también es esa corriente en la que los artistas recrean nuevas visiones y narraciones de un universo ya integrado en la cultura pop. Por ejemplo, y utilizando ambas concepciones, toda la filmografía de Quentin Tarantino sería un fanart.
Es precisamente el cine uno de los ámbitos que más visiones alternativas produce. Puede ser en forma de guiños y homenajes en las películas (tal y como decimos con Tarantino) o, por ejemplo, a través de los carteles no oficiales de los films. Recreaciones que pueden ser incluso más artísticas y reivindicativas que las originales. Y con más subtexto. Obviamente, no es lo mismo diseñar un póster con fines publicitarios que a posteriori y con la historia aportando material que puedes integrar.
El Instagram de Posteraholic es un #must para todo aquel cinéfilo. Seas o no amante de los carteles de películas, esta cuenta es como darte una vuelta por el Paseo de la fama de Hollywood. No estás viendo a la estrella original, pero disfrutas de la esencia de ella.
Recopilando obras a modo de contenedor de diferentes diseñadores y artistas, @posteraholic publica versiones alternativas con carteles de películas. Una visión diferente de la historia del cine en la que los creadores pueden jugar con spoilers y el peso que el tiempo ha otorgado a los films. Ilustraciones, caricaturas, tipografías, dibujos o composiciones gráficas. Cualquier elemento es válido.
A pesar de tener casi 800 publicaciones, en @posteraholic se repiten unas obras en mayor medida. Son films que no tuvieron una gran vida comercial e incluso están consideradas de culto. Y no sólo vive del cine más clásico. Por cada cartel de ‘Taxi Driver’ hay otro de ‘Nightcrawler’. Bienvenidos al paseo underground de los pósters de películas.
El club de la lucha
Una de las últimas películas que se convirtieron en obra de culto gracias a los videoclubs. El film que convirtió temporalmente a Edward Norton en el actor favorito entre los que oscilan entre la generazión Z y los primeros millennials. Perderás la cuenta de las publicaciones de @posteraholic que homenajean 'Fight Club'.
Drive
Podría haberse hecho en los años 70, pero entonces nos hubiéramos perdido su banda sonora electrónica y esa cazadora con el escorpión. Que no falte tampoco el aséptico jeto de Ryan Gosling como elemento recurrente en los carteles.
Whiplash
Otra de esas películas que parecen haber nacido clásicos. La importancia de la música jugó mucho peso en la trama, en la acogida que le dio el público y, años después, en las versiones alternativas de su cartel.
Tarantino
Un director cuyo ego y presencia es igual de importante (mediáticamente) que su obra en sí. Es por ello que englobamos los diseños alternativos que aparecen en @posteraholic. Pero sí, ganan ‘Pulp Fiction’ y ‘Kill Bill’ en el Instagram.